¿Cómo sembrar calabazas en el huerto?
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El término calabaza hace referencia a una gran variedad de frutos de especies pertenecientes a la familia de las cucurbitáceas. Las distintas variedades de calabazas se diferencian por su forma, color y/o textura. Dentro de la familia de las cucurbitáceas, se pueden distinguier 3 especies principales:
- Cucurbita maxima: se trata de la calabaza común.
- Cucurbita moschata: llamada calabaza moscada. Lo más característico de esta especie es que las calabazas tienen forma de cacahuete.
- Cucurbita ficifolia: también conocida como calabaza de cabello de ángel o cidra.
En este artículo, te proporcionaremos una guía completa sobre el cultivo de la calabaza, desde la preparación del suelo hasta el proceso de siembra. Así que prepárate para descubrir todo lo que necesitas saber para cultivar tus propias calabazas y disfrutar de sus numerosas propiedades.
Lo primero que tenemos que saber es ¿cuándo sembrar/plantar las calabazas?
Dado que las calabazas necesitan temperaturas superiores a los 30ºC para su desarrollo, la siembra ha de realizarse a finales de marzo o durante los meses de abril y mayo.
¿Dónde ubicar nuestro cultivo de calabazas?
En cuanto a suelos, las calabazas son plantas poco exigentes, admitidiendo prácticamente toda clase de terrenos, aunque prefiere los suelos frescos, francos y ricos en materia orgánica, sin encharcamientos de agua, ya que podría llegar a pudrir la raiz de la planta. En cuanto al pH del suelo, las calabazas se desarrollan óptimamente en suelos ligeramente ácidos.
Preparación del terreno
Personalmente, recomiendo antes de realizar la siembra, de realizar una labor profunda sobre el terreno de, al menos, unos 20 cms, especialmente si vamos a cultivar las calabazas en un régimen de secano. Si vemos que el suelo anda corto de nutrientes, también es importante realizar un buen abonado del suelo, ya sea con estiércol o compost.
Siembra de las pipas de calabaza
Una vez preparado el terreno, procederemos a la siembra y para ellos abriremos orificios o casilleros a lo largo de una hilera, donde colocaremos en cada orifico 4-5 semillas a una profundidad de unos 3 cms. La distancia entre orificios será de 1,5 metros, mientras que la distancia entre hileras va a ser de 1,5 a 2 metros.
Mantenimiento del cultivo
Entre los cuidados del cultivo, hay que regar las plantas con cierta frecuencia (sin pasarnos con el agua), aunque también es un cultivo que puede darse en secano. Como en casi todos los cultivos, habrá que escardar el suelo para airearlo y eliminar las malas hierbas.
Como hemos dicho, en cada casillero tendríamos colocadas entre 4 y 5 semillas. Si germinaran todas, tendríamos 4-5 plantas de calabaza en un mismo casillero, luego habría que realizar un aclareo. Esta operación consiste en dejar una o dos de las plantas más vigorosas de las germinadas y se realiza cuando las plántulas tienen la tercera hoja bien formada.
